¿Te gustaría tener plantas en casa pero no consigues que sobrevivan? Una «Costilla de Adán» es una planta súper resistente, ideal para novatos en la jardinería, que no tienen mucho tiempo para dedicar a sus plantas pero que les gusta disfrutar de un buen ejemplar en casa.
La «Costilla de Adán» procede de bosques tropicales húmedos. Se encuentra en la zona de Méjico, aunque es común encontrarla en los porches y casas de zonas mediterráneas. Es una planta que puede llegar a alcanzar los dos metros de altura, de porte semirígido, ya que en realidad es una planta trepadora que utiliza soportes para erguirse.
Necesita muy pocos cuidados, en interior, se le debe procurar un lugar luminoso pero sin sol directo, ya que es una planta que, en su hábitat, crece al abrigo de las copas de los árboles más grandes, por lo que no goza de luz del sol directa.
Necesita humedad y calor pero no por eso debes encharcar el sustrato. En invierno, debes esperar a que la tierra se seque entre riego y riego para evitar pudrir sus raíces, además de abonarla una vez al mes. No soporta heladas ni climas fríos, con lo que es ideal para estar dentro de casa. Soporta incluso la calefacción, siempre y cuando evites que el ambiente se reseque poniendo humidificadores en los radiadores.
Como bien decimos, la «Costilla de Adán» es una de las plantas más utilizadas en el mundo de la decoración gracias a su imponente presencia y fácil cuidado. Pon una de estas magníficas plantas en tu salón y darás un cambio de imagen a tu casa de forma sencilla y fácil.
